La CHD detectó durante el año pasado 74 vertidos ilegales a los ríos de la provincia leonesa
Helena Caballero anuncia una inversión de diez millones para mejorar la calidad de las aguas.
La Confederación Hidrográfica del Duero abrió durante el año pasado 74 expedientes sancionadores en la provincia de León relacionados con vertidos no autorizados a los ríos. El dato forma parte del balance presentado ayer por la presidenta de este organismo, Helena Caballero, quien se refirió al cumplimiento de la Directiva Europea que obliga a que en el año 2015 se alcance «un buen estado de las aguas». De ahí que el organismo que preside se haya propuesto mantener una actitud de tolerancia cero ante los vertidos que contaminan las aguas. el pasado año la CHD abrió 2.255 expedientes sancionadores, de los que 437 estuvieron relacionados con vertidos no autorizados y, entre las provincias, fueron las de León y Zamora (73) donde se detectaron más irregularidades, seguidas de Burgos y Segovia, con 64 cada una.
Entre las inversiones previstas por la Confederación, diez millones irán destinados a mejorar la calidad de las aguas subterráneas y otros siete millones servirán para extender las redes encargadas de medir los parámetros físicos-químicos y biológicos de las aguas superficiales.
El resto de la inversión estará destinada al control de los vertidos, la construcción de un nuevo laboratorio de aguas y a ampliar la guardería fluvial, que actualmente componen un equipo de 58 personas, que se verá ampliado hasta 71 profesionales dentro de un mes.
También se incrementará el número de trabajadores que integran los denominados equipos toma-muestras, que actualmente forman seis personas y a los que se sumarán dos nuevas para realizar su actividad ante vertidos accidentales e incidentes inesperados, que precisan de una reacción rápida. La CHD va a poner en marcha un plan de medición del agua, que prevé que en dos años sumen casi mil puntos de obtención de datos, 400 más que los existentes en la actualidad, de los que 300 se aplicarán bajo tierra y cien en superficie.
La inversión
En este cometido, el Ministerio de Medio Ambiente invertirá 24 millones de euros. Cerca de diez se destinan a mejorar la calidad de las aguas subterráneas. De ellos, 7,5 millones se dedicarán a extender los piezómetros (red de aparatos que indica los niveles en los que se encuentran los acuíferos), mientras que los otros 2,5 se invertirán en conocer la calidad del agua subterránea que circula por esos acuíferos. Otros siete millones de euros se destinarán al control del agua superficial, de los cuales seis se utilizarán para extender la red que medirá los parámetros físico-químicos de calidad de este tipo de agua, y un millón más en extender las redes que indicarán los parámetros biológicos.